Pbro. José Magdaleno Alvarez B./@josegregoriohernandezisnotu
El próximo martes 30 de enero se cumplen 159 años de que el beato José Gregorio Hernández recibiera las aguas del bautismo en el templo de Escuque.
Así lo narra Ernesto Hernández, sobrino muy cercano del beato en el primer Tomo de su obra Nuestro Tío José Gregorio:
Los esposos Hernández Cisneros… trascurridos los cuarenta días que en un cuarto oscuro pasaba la madre después de parto, hicieron los preparativos para bautizar al niño lo más pronto posible.
-¿Es que se marchan de Isnotú los Hernández Cisneros? – preguntaban muchos.
-No. Sino que preparan viaje a Escuque, con el propósito de cristianar al recién nacido.
Con éste en los brazos de su madre; que iba acompañada de Benigno, de María Luisa, su cuñada; de don Tobías Lobo, elegido padrino; de otras personas amigas y del servicio necesario, después de atravesar la montaña a lomo de mula. La simpática caravana llegó felizmente a la población de Escuque, distantes seis leguas de Isnotú, o sea tres horas largas de camino, sin contar las paradas.
“En la iglesia parroquial del Smo. Nombre de Jesús de Escuque, a treinta de enero de mil ochocientos sesenticinco, el Pbro. Victoriano Briceño, con licencia que le conferí yo, el infrascrito, cura rector de ella, autorizado con la del venerable cura de la villa de Betijoque, bautizó solemnemente, según el Ritual Romano, a un niño que nació el día veintiséis de octubre último, y le puso por nombre José Gregorio, hijo legítimo de Benigno Hernández y de Josefa Antonia Cisneros, vecinos de Libertad, jurisdicción de aquella villa. Fueron sus padrinos Tomas Lobo y Perpetua Enríquez, a quienes advirtió el parentesco espiritual y obligaciones de que certifico.- Mtr. Zoilo Troconis (Parroquia de Santísimo Nombre de Jesús de Escuque. Libro de Bautismos, año 1865).”
Ernesto Hernández agrega un sugerente comentario al respecto: _Nota: Nuestro padre César Hernández Cisneros, hermano germano de José Gregorio, que conoció y trató a Jose Gregorio íntimamente, decía que podía asegurarse que José Gregorio no perdió la gracia bautismal.- E.H.B._
De aquel acontecimiento queda, además de la pila bautismal del templo de Escuque, un recuerdo físico de ese día: una nota en el cuadernito sobre las fechas de nacimiento, bautismo y confirmación de sus hijos llevaba el papá, Benigno Hernández, en el cual aparece esta frase exacta: enero 30 de 1865. *Hoy fue bautizado* en Escuque por el Pbro. V. Briceño autorizado por el Ve. cura Pbro. Zoilo Troconis… El papá registró en su cuadernito el bautizo de José Gregorio el mismo día que ocurrió. Ni el agotamiento del viaje a caballo por los montañosos caminos, ida y vuelta, desde Isnotú a Escuque y viceversa, le desmotivó a poner por escrito tan importante ocasión.
Fe de Bautismo del Beato José Gregorio Hernández Cisneros
Este interesantísimo folletico, elaborado por el muy disciplinado y precavido padre, cuyas medidas son catorce centímetros de alto por ocho de ancho, y que contiene 22 hojitas de color azul clarito, fue donado y se resguarda en el Santuario de Isnotú desde el pasado 26 de octubre. La pequeña y encantadora fuente para la historia familiar resguarda breves datos sobre los trece hijos de Benigno Hernández y sus dos matrimonios. Los descendientes agregarían, posteriormente, otros datos referenciales.
