Vicaría diocesana para las comunicaciones
El obispo diocesano, Monseñor José Trinidad Fernández Angulo, junto a unos cuarenta sacerdotes, presidió la Misa exequial del padre Ignacio Ramón García en la iglesia Nuestra Señora del Carmen en Boconó, parroquia donde nació y últimamente ejerció su ministerio sacerdotal.
A las diez y media del jueves primero de enero, comenzó la solemne eucaristía donde se hicieron presentes también sus familiares, diáconos permanentes, grupos de apostolado y la numerosa feligresía parroquial.
Monseñor José Trinidad Fernández Angulo, junto a unos cuarenta sacerdotes, presidió la Misa exequial del padre Ignacio Ramón García en la iglesia Nuestra Señora del Carmen en Boconó.
Monseñor Trino explicó, a la atenta y consternada feligresía, que en la celebración de esta la Misa exequial se destacaba la virtud de la esperanza y la certeza de nuestra fe en que viviremos en la morada de Dios, así como lo hemos predicado y creído durante nuestro peregrinar con los hombres. Profesamos que hay un más allá después de la muerte y confiamos en la promesa del Señor: “me voy a prepararles un sitio”. Por eso los cristianos nos abandonamos en la misericordia divina y buscamos practicar las buenas obras en perfecta unión con la oración y la contemplación.
El obispo hizo abundante alusión al ministerio ordenado y a los sacramentos que imparten los sacerdotes pues estos signos representan la entrega generosa del presbítero, junto a la caridad pastoral y la vida espiritual para la unidad constante con Jesucristo, Sumo y eteno sacerdote. También recordó que, a los sacerdotes, así como predicamos a la feligresía, nos corresponde vivir y morir en Cristo, como enseñaba San Pablo Apóstol; esa predicación se debe corresponder con el testimonio; andar en vida nueva constantemente para él y para el pueblo de Dios, es tarea fundamental del ministro consagrado.
Terminada la Eucaristía el padre José Gregorio Escalona leyó la nota de duelo diocesana; también se escuchó un audio enviado por Monseñor Lizandro Rivas, obispo auxiliar de Caracas. La alcaldía del Municipio Campo Elías y grupos de apostolado parroquial manifestaron su testimonio de gratitud, consuelo y cercanía para con la Diócesis de Trujillo y la familia del padre Ignacio. El padre Luis Felipe Torres, arcipreste de la zona pastoral, expresó los agradecimientos y exhortó a participar en las novenas de misas que se efectuaran tanto el templo local como en las diversas parroquias de la diócesis.
Los sacerdotes y feligreses presentes hicieron un recorrido con los restos mortales del P. Ignacio por las calles aledañas al templo parroquial
El padre Ignacio recibió sepultura en la nave izquierda del templo parroquial, cerca del altar mayor, después de un pequeño recorrido en hombros de los sacerdotes y feligreses con sus restos mortales por las calles aledañas al templo parroquial.
El boconés “padre Nacho”
Hijo de Ignacio Ramón Ramos y Albertina García, ambos difuntos, el padre Ignacio Ramón García, llamado padre Nacho por sus conocidos, nació en la parroquia El Carmen el siete de noviembre de 1961. En aquella comunidad parroquial sirvió como monaguillo, catequista e integrante de la Legión de María. Fue ordenado sacerdote para la arquidiócesis de Maracaibo, el 8 de agosto de 1992 donde trabajó pastoralmente durante varios años.
En la Diócesis de Trujillo fue párroco en Nuestra Señora de Chiquinquirá del Dividive, Nuestra Señora del Carmen en Sabana de Mendoza, San Rafael de Campo Elías y El Carmen de Boconó desde el 16 de octubre de 2022. También ejerció la docencia por varios años. Últimamente se vio aquejado por algunos problemas de salud. Falleció el pasado martes 30 de enero. Desde esa misma noche hubo el velatorio y la celebración de diversas eucaristías en el templo parroquial.
